¡Hola! Soy Richard Sabogal y en esta oportunidad te quiero hablar de un mundo que todos conocen, pero no a fondo.
Ser ghostwriter es más que escribirle un libro a otro, este es todo un mundo donde hay jerarquías, están los que le escriben a famosos y se ganan una gran suma, los que escriben para medios, aquellos que le escriben a personas que quieren un libro y los que hacen textos para redes.
Ser ghoswriter le da pudor a muchos
Muchos temen mostrar que son escritores fantasma, prefieren que sea un secreto, confieso que lo soy desde hace años y hasta hace poco reconocí que sí, lo soy y he escrito mucho y para muchos.
Cuando reconocí que era escritor, cometí el pecado de muchos colegas, asumir esto como la cara B de la profesión, como “Soy editor pero también escribo libros para completar el mes”. Ahora forma parte de mi lado A, escribo, edito, corrijo, publico, maqueto, hago todo lo que corresponda en el mundo de los libros, es mi profesión y así me gano la vida.
Creo que es hora de asumirlo para atraer más del Universo.
Son contados con los dedos de una mano los escritores que pueden vivir de lo que escriben. Conozco escritores con fama en el país que se redondean el mes siendo correctores y editores, dan cursos online por sus redes, van a eventos donde colaboran. Hacen lo que sea para poder pagar las cuentas.
Ser ghostwriter es un camino y ya no me parece como algo malo. No es una labor denigrante, en absoluto, eso sí, no es mi tarea principal, intercalo con otras labores, con otros negocios pasivos que tengo o empleo el escribir fantasma publicando libros en KDP, donde se venden mientras escribo esto.
Si quieres saber cuántos libros imprimir, aquí te aconsejo.
Este mundo no se parece a ninguno
El mundo de los ghostwriter no se parece a ninguno. Ni siquiera al de los sicarios, que son anónimos salvo cuando salen a dispararle a alguien. Una cosa es que te muevas en la sombra porque no puedes decir “Yo escribí ese libro que vende miles al mes” y otra que ocultes la profesión.
En este trabajo, la relación entre nosotros y el producto es bastante particular. Todos decimos lo mismo: Una vez entregamos el texto, si te he visto no me acuerdo. Yo veo esto como cualquier otro trabajo, solo que lo hago en mi oficina de casa, cobro por ello y si se publica o no, ya es problema de quien lo tenga, aunque todo lo escrito por mí lo he visto luego en Amazon o en alguna librería.
Hay un hilo sentimental con algunas obras, sinceramente hay libros que he terminado y me da dolor soltar porque me encanta el resultado. Libros de cuentos, novelas que me sorprende el resultado, que digo que me dejé llevar por la inspiración y me da tristeza ver que ahora es de otro, pero es el precio del trabajo.
Hace poco me encontré un libro de determinada temática, apareció en una investigación del tema, tiene 700 reseñas en Amazon, es el número 1 en su categoría, para tener esa cantidad de reseñas, debe haber vendido miles de copias.
Claro, sin duda tiene su trabajo de marketing, tal vez Ads, pero igual, las reseñas no mienten, 4,8 de 5.
Deja un sabor extraño, entre satisfacción y amargo.
¿Qué se necesita para ser ghoswriter?
Ser un ghostwriter requiere un poco de cultura o al menos parecerlo. También necesitas tener un poco de MacGyver. No cualquier puede saltar de temas y géneros, es algo que se aprende. Por ejemplo, hoy puedo escribir capítulos de novela, adelantar un libro de dietas antiinflamatorias y luego escribir sobre mitología nórdica.
No confundo a Thor con el ayuno intermitente ni se me cuela en la novela, separo cada tema. Eso sí, cuando termino de escribir y entregar he olvidado mucho de lo hecho.
Lo que marca un trabajo bien hecho
Un buen ghostwriter se ve cuando luego que está escrito el libro, se esfuma. Te tienes que meter en muchos personajes y zapatos, hablar como médico, como gay, como asesino, como experto en trading, criptomonedas, psicología oscura, magia, mitologías y hasta viagra.
Eres “experto” en todo.
Ya que hablamos de libros y de escribir, aquí te cuento un poco sobre los papeles más hermosos para libros y cuál va mejor según el tipo de obra.
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